GraffWine es más que un gran vino, es un pequeño sueño que fusiona enología y arte. Un proyecto para brindar por nuestra gente y enorgullecernos del trabajo de los artistas vinculados a la tierra en la que crecen nuestras viñas.
Vino y arte en cada botella
En esta primera añada, el protagonista de nuestra etiqueta es el muralista Román Linacero, un artista vinculado a la campiña segoviana, igual que nuestro vino.
Nuestro verdejo nace de viejos viñedos de Verdejo en altitud, en Nieva, donde cada una de sus cepas cuenta una historia. Su elegancia y mineralidad capturan la pureza de su origen y la esencia de una tierra ancestral.
El Arte Urbano encuentra su refugio en el vino
El nombre Graff es la raíz del Graffiti, ese arte rebelde que surge de las calles como una voz que se niega a ser silenciada. De la misma manera, nuestras botellas llevan consigo no solo la tinta del vino sino la tinta de los artistas de raíz que, como Román Linacero, encuentran en su obra una forma de reivindicar su conexión con la tierra y el agradecimiento a la gente que le ha acogido.
La etiqueta de cada botella es un manifiesto visual
En Graff Wine, el vino es mucho más que una bebida; Es un elemento de festejo local, un símbolo de la cultura y de la resistencia de estas tierras que se niegan a desvanecerse.
La tinta fluye en las arterias de esta tierra, así como en la vena de los artistas: ambas se utilizan para contar historias, para capturar emociones y para crear.
En cada sorbo de Graff Wine se siente esa dualidad entre lo salvaje y lo tradicional, entre la rebeldía del arte y la historia centenaria del vino.
GRAFFWINE VERDEJO
Elaborado 100% con esta uva autóctona y legendaria, procede de viñedos viejos de suelos cascajosos en el entorno de Nieva, que aportan singularidad, intensidad aromática y expresividad al vino.
En su primera añada en el mercado GRAFFWINE VERDEJO 2023 ha permanecido 4 meses en contacto con sus propias lías finas en depósitos de acero inoxidable, un factor que aporta al vino untuosidad, capacidad de guarda, volumen y estructura en boca, pero manteniendo las características de la uva verdejo.
ELABORACIÓN:
100 % verdejo de viña vieja
El mosto macera en frío con los hollejos durante 8 horas a 7 ºC, potenciando así los aromas característicos del Verdejo. La fermentación se realiza a una temperatura de entre 14 y 16 ºC, lo que ayuda a mantener e intensificar el sabor único de esta variedad.
A continuación, con el fin de adquirir estructura y potencial de crianza, el vino se almacena en contacto con las lías finas, que refuerzan su estructura aportando ácidos grasos y sensaciones más amplias y glicéricas en boca. Esto lo convierte en un vino más elegante y de perfil gastronómico
Notas de cata:
- Fase visual: Color amarillo pajizo de intensidad media con profundos reflejos verdosos. Brillante y limpio.
- Fase Olfativa: Ofrece intensos aromas de fruta blanca, pero predominan las notas de fruta tropical. Toques herbáceos (hinojo), ecos balsámicos y un marcado fondo anisado con que emerge con notas de flores blancas.
- Boca: Fresco, elegante y suave, bien estructurado. Sabroso, aromático y de fácil entrada en boca.
- Maridaje: Perfecto para acompañar arroces, pescado ahumado o a la parrilla, así como mariscos, sushi, ensaladas, platos de pasta y cualquier aperitivo poco graso.
Este Verdejo destaca por su origen en una cuidadosa selección de parcelas, viñedos adaptados a la tipología de vino que queremos elaborar. Su crianza sobre lías durante 4 meses le aporta complejidad, untuosidad y evolución, consolidando su capacidad de guarda.
Con una producción limitada a solo 2.921 botellas, este vino resalta por su singularidad y exclusividad.
La esencia del vino con el sello artístico de Sr. Momán
Nuestra primera añada emana de Nieva, en plena campiña segoviana. A muy pocos kilómetros de nuestros viñedos centenarios y, agazapado sobre un andamio, Roman Linacero ha convertido el municipio de Nava de la Asuncion en un museo al aire libre. Este artista, con sus murales, y bajo el seudónimo de Sr. Momán, ha conseguido contar a través del arte la historia del municipio y de sus gentes. Director de la escuela Punctum cree en la pintura como una forma de expresión que hay que mantener viva.
Tradición Maestría Dedicación
Su formación como pintor figurativo ha pasado por gente como los chilenos afincados en España Alejandro Decinti y Oscar Villalón, la Escuela Superior de Dibujo Profesional (ESDIP), maestros internacionales como Alyssa Monks o Joongwoon Jeong, y talleres con artistas de la talla de Dino Valls o Eloy Morales.
No obstante, y a pesar de hoy él mismo ser maestro, considera que lo mas importante del aprendizaje es sudar la gota gorda con el pincel en la mano.